Vamos con el sumidero o sump, una urna que se coloca normalmente debajo del acuario propiamente y que recibe el agua del rebosadero y que en la fase final la devuelve por medio de una bomba de subida, creando así un circuito cerrado.
Pero..., ¿qué ventaja tiene colocar un cacharro ahí abajo que nos va a complicar todo el sistema y que puede ocasionarnos más de un problema? Pues en principio bastantes como para que sea algo imprescindible.
Vamos a enumerar las principales:
- Aumento del volumen total de agua: ya lo dice el refranero popular, ¡burra grande ande o no ande! Cuanto más agua, mayor estabilidad del sistema, pues se diluyen los contaminantes que pueda haber en el agua y los cambios de parámetros afectarán en menor medida al conjunto de nuestro acuario.
- Superficie limpia: permite realizar una limpieza de la zona superficial del agua, ayudando a mantenerla cristalina al llevarse por el rebosadero la capa de suciedad que se genera en la superficie.
- Nivel de agua constante: la evaporación de agua del acuario la asumirá el sump, evitando así la tan antiestética linea de cal que se puede ver en los acuarios sin sump al bajar el nivel normal.
- Facilita y mejora considerablemente los cambios de agua y la adición de productos químicos: al realizarse en el sump, permite que estos se mezclen mejor antes de llegar al acuario.
- Mejora la circulación de agua y la oxigenación: el retorno de agua del sump al tanque y del rebosadero al sump, hace que esta se mueva más y se mezcle con el aire.
-Ayuda a mantener constante el PH y al crecimiento de las macro-algas: puesto que permite continuar con el fotoperiodo independientemente del acuario, pudiendo incluso hacer un fotoperido inverso que mantendrá más estable el carbono (y por tanto del pH)
-Sirve para ocultar todo el equipo del acuario, que no es poco: skimmer , el termócalentador, reactores....
- Aumenta el filtrado total del acuario, al poder añadir en su interior más roca, canutillos, perlón, macro-algas y todo lo que a uno se le ocurra.
Llega entonces el momento de diseñar el sump. Como es natural, dependerá de las dimensiones de la urna, la mesa donde va ubicado y lo que uno tenga pensado introducir en él. Como regla general, se admite que el volumen mínimo del sump debe rondar 1/4 del volumen del acuario principal.
Yo me he decantado, después de leer en foros y webs, por una distribución que podemos llamar clásica; pues es quizás la que más se repite.
En primer lugar tenemos el hueco del skimmer. Este departamento, recibe el agua que cae del rebosadero y se coloca el skimmer, por lo que tiene la anchura suficiente para que entre el equipo.
Luego tenemos una especie de loop que se denomina "trampa de burbujas" cuya misión es reducir la velocidad de circulación del agua, consiguiendo que pase así más tiempo en el sump, eliminando las microburbujas que llegarían al refugio y estabilizando el nivel total de agua.
Fue la parte que más me costó de hacer, ya que no tenía apenas sitio para poder siliconar debido a su geometría, pues se necesitan dos placas de la misma altura que la del compartimento del skimmer, separadas entre 2.5 - 3 cm una de la otra y la primera de ellas más elevada que la segunda, permitiendo un paso de agua por debajo del loop de una distancia de 2.5 o 3 cm tambíen.
Seguido a la trampa de burbujas, se coloca el compartimento que se suele llamar refugio de algas, que es donde se colocará la macroalga y el resto de elementos filtrantes; en mi caso roca, siporax y matrix, que ayudarán a afianzar la colonia bacteriana.
Llegamos al compartimento que alojará la bomba de subida, encargada de devolver el agua que baja del rebosadero de nuevo al acuario. Lo suyo es mirar la bomba que uno necesitará para ver sus medidas, y dejar un hueco acorde.
Finalmente nos queda el último de los habitáculos de nuestro sump, el depósito de relleno de agua que gracias a un rellenador automático nos repondrá el agua perdida por la evaporación. Aquí hay que tener mucho cuidado conque sea totalmente estanco, ya que un transvase de agua dulce descontrolado al resto del sump nos varirará con el tiempo la salinidad.
Y ya tenemos nuestro sump listo para la acción.
Pero..., ¿qué ventaja tiene colocar un cacharro ahí abajo que nos va a complicar todo el sistema y que puede ocasionarnos más de un problema? Pues en principio bastantes como para que sea algo imprescindible.
Vamos a enumerar las principales:
- Aumento del volumen total de agua: ya lo dice el refranero popular, ¡burra grande ande o no ande! Cuanto más agua, mayor estabilidad del sistema, pues se diluyen los contaminantes que pueda haber en el agua y los cambios de parámetros afectarán en menor medida al conjunto de nuestro acuario.
- Superficie limpia: permite realizar una limpieza de la zona superficial del agua, ayudando a mantenerla cristalina al llevarse por el rebosadero la capa de suciedad que se genera en la superficie.
- Nivel de agua constante: la evaporación de agua del acuario la asumirá el sump, evitando así la tan antiestética linea de cal que se puede ver en los acuarios sin sump al bajar el nivel normal.
- Facilita y mejora considerablemente los cambios de agua y la adición de productos químicos: al realizarse en el sump, permite que estos se mezclen mejor antes de llegar al acuario.
- Mejora la circulación de agua y la oxigenación: el retorno de agua del sump al tanque y del rebosadero al sump, hace que esta se mueva más y se mezcle con el aire.
-Ayuda a mantener constante el PH y al crecimiento de las macro-algas: puesto que permite continuar con el fotoperiodo independientemente del acuario, pudiendo incluso hacer un fotoperido inverso que mantendrá más estable el carbono (y por tanto del pH)
-Sirve para ocultar todo el equipo del acuario, que no es poco: skimmer , el termócalentador, reactores....
- Aumenta el filtrado total del acuario, al poder añadir en su interior más roca, canutillos, perlón, macro-algas y todo lo que a uno se le ocurra.
Llega entonces el momento de diseñar el sump. Como es natural, dependerá de las dimensiones de la urna, la mesa donde va ubicado y lo que uno tenga pensado introducir en él. Como regla general, se admite que el volumen mínimo del sump debe rondar 1/4 del volumen del acuario principal.
Yo me he decantado, después de leer en foros y webs, por una distribución que podemos llamar clásica; pues es quizás la que más se repite.
En primer lugar tenemos el hueco del skimmer. Este departamento, recibe el agua que cae del rebosadero y se coloca el skimmer, por lo que tiene la anchura suficiente para que entre el equipo.
Luego tenemos una especie de loop que se denomina "trampa de burbujas" cuya misión es reducir la velocidad de circulación del agua, consiguiendo que pase así más tiempo en el sump, eliminando las microburbujas que llegarían al refugio y estabilizando el nivel total de agua.
Fue la parte que más me costó de hacer, ya que no tenía apenas sitio para poder siliconar debido a su geometría, pues se necesitan dos placas de la misma altura que la del compartimento del skimmer, separadas entre 2.5 - 3 cm una de la otra y la primera de ellas más elevada que la segunda, permitiendo un paso de agua por debajo del loop de una distancia de 2.5 o 3 cm tambíen.
Seguido a la trampa de burbujas, se coloca el compartimento que se suele llamar refugio de algas, que es donde se colocará la macroalga y el resto de elementos filtrantes; en mi caso roca, siporax y matrix, que ayudarán a afianzar la colonia bacteriana.
Llegamos al compartimento que alojará la bomba de subida, encargada de devolver el agua que baja del rebosadero de nuevo al acuario. Lo suyo es mirar la bomba que uno necesitará para ver sus medidas, y dejar un hueco acorde.
Finalmente nos queda el último de los habitáculos de nuestro sump, el depósito de relleno de agua que gracias a un rellenador automático nos repondrá el agua perdida por la evaporación. Aquí hay que tener mucho cuidado conque sea totalmente estanco, ya que un transvase de agua dulce descontrolado al resto del sump nos varirará con el tiempo la salinidad.
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| Prueba de estanqueidad |
Y ya tenemos nuestro sump listo para la acción.
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